Continuando con los goleadores puros que están destacando este año en la Serie A italiana, tras Di Natale y Cavani, encontramos a tres puntas con características e historias muy diferentes.
Samuel Eto´o (Inter). 19 goles: El goleador camerunés es posiblemente el mejor jugador africano de todos los tiempos, y por supuesto, todo un ídolo en su país y su selección. Llegó con apenas 16 años a España, a la cantera del Real Madrid, donde no dispuso de oportunidades ni allí ni en varias cesiones. Se dio a conocer en Mallorca, llevando al equipo a una Copa del Rey y una participación en Champions con sus goles lo que le valió para dar el salto al Barcelona. Allí se convirtió en pieza clave durante la reciente época dorada del Barcelona, en este último lustro. Problemas de "feeling", con el entrenador Guardiola, tras el triplete, le llevaron gratis al Inter en la operación por Ibrahimovic en 2009.
En Milan volvió a ganar el triplete, pero en el plano personal la temporada en Italia no fue del todo satisfactoria. Le costó bastante adaptarse, y además Mourinho le apartaba a la banda, donde su trabajo era incansable, pero su aportación ofensiva, casi nula. Sin embargo, este año, primero con Benítez, y ahora con Leonardo, ha sido colocado en la punta de ataque, solo o con Pazzini, y es la pieza clave de este equipo, más incluso que Sneijder. Tiene libertad absoluta. Baja a recibir para iniciar el ataque, presiona la salida del balón del contrario, cae a bandas con absoluta movilidad, desconcertando defensas y las destroza con su velocidad.
Por supuesto, todo esto se traduce en gran cantidad de goles, además de regalar muchos otros a sus compañeros. Su comienzo de temporada fue espectacular, y si bien su rendimiento cayó en diciembre, ha vuelto a recuperar la forma en el momento clave de la temporada. Sus goles llevarán al Inter a luchar hasta el final por Scudetto y Champions League.
Marco Di Vaio (Bologna). 18 goles: El delantero romano es todo un trotamundos en esto del fútbol, pero a sus 34 años, parece haberse estabilizado como capitán en el Bologna, equipo por el que ha renovado por un año más. Y es que ha jugado en 10 equipos diferentes en España, Francia, y por supuesto, Italia. Canterano del Lazio, marcaba con facilidad, y tras varias cesiones, se fue a la Salernitana, en Serie B. Allí fue Capocannoniere, en 1998, ascediendo al equipo de la Campania, y tras una buena temporada personal en A, el Parma se hizo con sus derechos.
Tres temporadas con muchos goles le hicieron ser el delantero más deseado de Italia, y en 2002, la Juventus le fichó por 32 millones de euros. Allí nunca gozó de confianza, y comenzó un periplo, con más pena que gloria, por Valencia y Mónaco. El Genoa, en Serie B, lo recuperó para Italia, y Di Vaio literalmente los ascendió, igual que había hecho 9 años antes en Salerno. Y por fin, el Bologna, primero cedido, y luego vendido. 54 goles en 3 años en Bologna, 130 goles en Serie A, sin duda toda una institución entre los delanteros italianos.
Juega siempre como referencia, bien acompañado por otro delantero, o bien solo acompañado por la perla uruguaya Gastón Ramírez, con el que ha formada una efectiva sociedad. Oportunista como pocos, siempre atento al rechace, es además un gran cabeceador. Le encanta asociarse con los compañeros, sobre todo con Gastón, y muchas veces parte desde banda izquierda para hacer la diagonal y fusilar desde una esquina a los porteros, buscando siempre paredes con el uruguayo. Parecía acabado cuando llegó a Bologna, pero a Di Vaio le queda aún cuerda para rato.
Alessandro Matri (Juventus). 16 goles: El protagonista del mercado invernal entre los goleadores italianos, después de su sonado pase del Cagliari a la Juventus, por un montante de 17 millones de euros, llegando de este modo a un grande a los 26 años. Canterano del Milan, todavía muchos se tiran de los pelos por haberlo dejado escapar, ya que perteneció a la disciplina rossonera hasta 2007. Es cierto que allí solo jugó un partido, pero en sus cesiones a Serie B y C (Prato, Lumezzane, Rimini) ya mostraba detalles. El Cagliari se hizo con su fichaje, pero durante dos años tuvo que acostumbrarse al banquillo, debido en parte a la competencia de Acquafresca, todo un ídolo en Cerdeña, y por su irregularidad, ya que alternaba rachas increíbles y golazos espectaculares, con meses en los que se borraba de los partidos.
La temporada pasada, tras la marcha de Acquafresca, se hizo con el puesto de titular, dándose a conocer en Italia. 13 goles, y derribó el récord de partidos consecutivos marcando, que tenía el mítico Gigi Riva. Y este año, parecido, ya llevaba 11 goles con el equipo sardo cuando la Juve lo eligió como sustituto del lesionado Quagliarella. Y en Turín no ha frenado su racha, siendo sin duda lo mejor de un equipo que ha estado en caída libre durante el 2011, lo que le ha valido el debut con la Nazionale italiana.
Bastante completo, puede jugar indistintamente como referencia o como segundo punta. Buena planta, protege muy bien el balón para la llegada de sus compañeros. Su técnica y una suficiente velocidad le permiten ganarse la vida en el área, además de ser un excelente cabeceador. Por el momento, el sosten del equipo juventino, mucho mejor que el otro fichaje, Luca Toni, pero habrá que ver el papel que juega el año que viene, ante la posible llegada de otros delanteros.
No al nivel de estos cinco jugadores, pero hay otros killers que también merecen tener su hueco. Ibrahimovic no lo consideramos a este nivel de killer, ya que es un jugador que no vive únicamente por y para el gol, sino que su juego es mucho más técnico y preciosista. Borriello en la Roma, Gilardino en la Fiore y Pellissier en el Chievo, todos con 10 goles este año, son delanteros del prototipo "tanque", de los que viven en el área al acecho del gol. Crespo es otro viejo zorro en este arte del remate y gol, de los que pueden pasar todo el partido desaparecidos pero luego solucionan los encuentros. Y Hernán lo sigue haciendo a sus 35 años en el Parma. Caracciolo (Brescia), Maxi López (Catania), Miccoli (Palermo), Floccari (Lazio), Bogdani (Cesena), Floro Flores (Genoa) o Acquafresca (Cagliari), son otros juagdores que son la referencia en sus respectivos equipos, luchen por Europa o por no descender.
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