viernes, 29 de junio de 2012

A Kiev, gracias y pese a Prandelli


Por primera vez, Italia no llegaba como favorita a un gran torneo. Tras el fracaso en el Mundial de Sudáfrica, Cesare Prandelli se hizo con el mando de la Nazionale y la cambió de arriba a abajo. También modificó, o al menos lo está intentando, un estilo histórico como ha sido el italiano hacia un modelo más de toque y posesiones largas con España como el espejo donde mirarse.

Pero todavía seguía ofreciendo dudas. Pasó una fase de clasificación muy cómoda, ante rivales netamente inferiores, y con el hueso del grupo, Serbia, sancionado tras los altercados de sus ultras en el partido de Génova. Sin embargo, le seguía costando horrores materializar los ataques largos, especialmente ante equipos pequeños, bien encerrados atrás. Y las dudas en defensa eran constantes ante equipos veloces, como se pudo ver en algunos amistosos, como el último ante Rusia. La investigación a Mimmo Criscito y su marcha de la concentración tampoco ayudaban.

A priori, las elecciones de Prandelli a lo largo de la Eurocopa no siempre han sido las más lógicas. No llevar a un nueve puro, contada excepción de Di Natale, como Destro o Matri; convocar a Balzaretti tras su horrible temporada en Palermo; abandonar el "juventino" 3-5-2 que tan positivamente había funcionado ante España y la primera mitad ante Croacia para volver a su querido mediocampo en rombo.

Sorprendentemente, Prandelli acertó en todo. En el partido decisivo no se notó la falta de un delantero goleador, gracias a la extraña eficiencia de Balotelli y la extraña regularidad de Cassano. Balzaretti está haciendo una Eurocopa por encima de sus posibilidades, en la que se ha salido, siempre en defensa de cuatro hombres, tanto de lateral izquierdo, su posición natural, como de eventual lateral derecho en la semifinal contra Alemania. Siempre midiendo a la perfección sus incorporaciones al ataque y aguerrido como pocas veces en defensa.

El sistema del mediocampo en rombo ha permitido a Italia tener el control total del partido ante equipos encerrados en su área como Irlanda e Inglaterra. Y eso que obliga a colocar a un lateral derecho bastante discreto como Abate (ayer Balzaretti), ante la ineptitud de Maggio en esa posición con ese sistema; obliga a un despliegue físico exagerado de Marchisio y De Rossi como volantes, que deben apoyar a Pirlo en la creación y realizar la cobertura a los laterales en defensa; y coloca a Montolivo como el mediapunta que no es, un Montolivo que se encuentra más cómodo cuando se acerca más a la creación con Pirlo.

A esta Italia le falta verticalidad en posesiones largas. Montolivo no la ofrece en su posición, y ni Balotelli ni Cassano son jugadores hábiles tirando desmarques. De hecho, la gran mayoría de los tiros de Italia han sido desde fuera del área, normalmente con poco peligro. Las opciones de Italia se multiplican cuando jugadores más verticales como Diamanti, Nocerino o Di Natale. Y a pesar de la clara superioridad en muchos de los partidos, la Italia de Prandelli ha sufrido. Y ha sufrido innecesariamente.

Pero a Prandelli le está saliendo todo perfecto a su modo y no va a cambiar. La defensa está imperial, con Barzagli a la cabeza, junto a sus compañeros en la Juventus Bonucci y Chiellini. Pirlo se ha convertido, si todavía no lo era, en el regista de Europa, llevando a la selección en volandas. Buffon está en un estado de forma perfecto, sin un solo error, y Cassano tiene el modo genio activado.

En definitiva, esta Italia ha unido finalmente la solidez defensiva y la intensidad histórica de Italia, junto a la propuesta de toque y presión alta de Prandelli. Se puede observar fácilmente en los partidos "grandes" de esta Eurocopa. Una Italia más "prandelliana" contra Inglaterra y una Italia más "italiana" contra Alemania. Pero sin perder ninguno de los dos estilos.

Y por supuesto, cabe felicitar a Prandelli, que, a pesar de su previsible falta de lógica, ha acertado hasta ahora en sus decisiones. Le han salido bien, pero quién se sabe si le hubieran salido mejor utilizando otras opciones al alcance de su mano.

lunes, 25 de junio de 2012

A semis con inmerecido sufrimiento



De nuevo, tal y como ocurrió hace 4 años, Italia se encontraba ante la lotería de los penaltis en los cuartos de final de la Eurocopa. En Viena se había llegado a la tanda tras un partido dominado completamente por España, y en el que Iker Casillas parecía dar un paso por delante de Buffon para convertirse en el mejor portero del momento. Italia cayó eliminada. Justo al contrario que ayer. 

Prandelli volvió a apostar por la defensa de cuatro hombres y el mediocampo en rombo, como contra Irlanda. Los únicos cambios fueron las entradas de Montolivo por el inoperante Motta en la mediapunta y Balotelli por Di Natale en ataque. Inglaterra, tal y como habían hecho los irlandeses, esperarían atrás con la esperanza de cazar alguna contra con Young, Rooney y Welbeck.

Más de lo mismo en Italia. Con los de la cruz de San Jorge formando dos líneas en la frontal del área, Italia se limitaba a hacer lo único que es capaz en esas circunstancias, acentuado con la llegada de Prandelli. Tocar a baja velocidad en horizontal en el mediocampo. Nadie rompía. Por mucho que se empeñe el exentrenador de la Fiorentina con su pupilo, Montolivo no sabe jugar de trequartista, no conoce los mecanismos para jugar entre líneas. Solo se mostraba cuando se colocaba en paralelo a Pirlo, con la incoveniencia de que Balotelli y Casssano perdían su referencia por detrás y se quedaban demasiado descolgados.

El partido de Andrea Pirlo fue magistral. Generando juego, aportando criterio a la circulación de balón y con sus pases como único medio de romper las líneas inglesas, tanto hacia la izquierda, donde Balzaretti estuvo menos atinado y más vigilado que contra Irlanda, o hacia Cassano y Balotelli. Como un metrónomo. Un perfecto mecanismo. Ni un solo error. Genial. Se creaban ocasiones, sí, pero todo demasiado sencillo para Inglaterra. De este modo, prácticamente todas las jugadas de posesiones largas italianas terminaban con desviados tiros lejanos, con excepción del chut al palo de De Rossi.

Todo el peligro que podía generar Inglaterra venía al contrataque. Especialmente por las bandas, donde Young y Milner debían lanzar a su equipo por los puntos más débiles de Italia en defensa. Sin embargo, los azzurri estuvieron magníficos para controlarlo. Ni siquiera habían perdido el balón cuando los dos jugadores más cercanos, normalmente uno de ellos siempre un De Rossi peleón como siempre, estaban presionando la salida de balón inglesa, obligándoles a un pelotazo largo o a retrasar y permitir la reorganización de Italia. De este modo, Young, Welbeck y sobre todo Rooney quedaron totalmente anulados.

En este aspecto, los únicos momentos de peligro pudo ser la salida de Carroll en la segunda mitad, un jugador que bajó todos los pelotazos que le llegaban. Pero la magnífica actuación del siempre seguro Barzagli y de un sorprendentemente acertado Bonucci evitaron que fuera a mayores, dejando la actuación ofensiva inglesa prácticamente al nulo.

Prandelli supo solucionar a la perfección el problema de la falta de verticalidad, con la salida de Diamanti por un Cassano cada vez más agotado en el torneo, Nocerino por De Rossi, que mostraba ya síntomas de cansancio tras el excelente trabajo realizado, y posteriormente Maggio por Abate en el lateral derecho. La duda es por qué no lo hizo de inicio, especialmente lo de Diamanti.

El zurdo de oro de Bologna sacó todo su repertorio. Golpeo con la zurda, centros precisos, regate, apoyo y desmarque en la posición  de trequartista. Además permitió a Montolivo retrasar su posición, gracias a que Diamanti se ocupaba en exclusiva de la mediapunta. En plena forma, Diamanti, que entró casi de relleno en el equipo, fue clave para Italia. Nocerino, al que le anularon un gol, y Maggio por su banda, aportaron la profundidad de la que había adolecido el equipo. Pero no fue suficiente para marcar.

En la tanda de penas máximas, sobresalió Buffon por encima de todos. Desde esos cuartos de final contra España parecía haber perdido el liderazgo mundial en las porterías. Nunca lo perdió, realmente. A sobriedad, elegancia, eficacia y confianza no le gana nadie al mejor portero del mundo. Young no pudo con la presión de tenerlo delante, enviando el balón al larguero. Cole tampoco, lanzando el penalty a sus manos. Así, el fallo de un Montolivo, al que siempre le faltó ese puntito de sangre caliente y confianza, no tuvo importancia. Se pudo disfrutar de esa genialidad de Andrea Pirlo, esa cuchara emulando a Panenka o a Zidane, con Italia en desventaja en la tanda. Para completar el partido. La emoción con el tanto decisivo de Diamanti, revulsivo total. Zurdo como Fabio Grosso. Como en el 2006. Con el espíritu que parecía perdido de esa Copa del Mundo.


lunes, 14 de mayo de 2012

La lista de Prandelli


Cesare Prandelli, seleccionador italiano, dio ayer la lista de convocados de cara a la concentración previa a la Eurocopa que se celebrará en junio en Polonia y Ucrania. Un grupo de 32 jugadores, de los cuáles tendrán que ser descartados 9 antes del 29 de mayo, cuando hay que dar las listas de 23 jugadores que acudirán a la gran cita. Así, que hasta que llegue ese día irán cayendo de la concentración jugadores hasta que se defina el grupo final. Estos son los jugadores que forman parte de la convocatoria.

En la portería no hay lugar para ninguna sorpresa. Gianluigi Buffon (Juventus) es titular fijo, mientras Emiliano Viviano (Palermo), Morgan De Sanctis (Napoli) y Salvatore Sirigu (PSG) han sido llamados con continuidad a la selección. Mientras, Federico Marchetti (Lazio) se ha quedado fuera por su sanción por agresión a un árbotro en Serie A. Todos han cuajado buenas temporadas, especialmente el campeón Buffon y Viviano durante la segunda vuelta de la temporada tras su grave lesión. Dando a estos dos como fijos, la disputa por el puesto de tercer portero queda para De Sanctis y Sirigu, dando menos opciones a este último.

En defensa, para el puesto de central están fijos los tres de la Juventus, Giorgio Chiellini, Andrea Barzagli y Leo Bonucci. Chiellini, lesionado en la última jornada de Serie A, podría perderse la primera parte de la concentración, pero lo normal sería que llegara a la Eurocopa. Además están convocados Angelo Ogbonna (Torino), jugador de Serie B, Davide Astori (Cagliari), Andrea Ranocchia (Inter) pese a una muy mediocre temporada y Salvatore Bocchetti (Rubin Kazan), que vuelve a la selección en la que es su primera convocatoria con Prandelli. En la lateral derecho, Christian Maggio (Napoli) y Ignazio Abate (Milan) son fijos de cara a la EURO, por delante de Mattia Cassani (Fiorentina), que perdió el puesto y ni siquiera está en esta lista. Y para el lateral izquierdo, están el titular Domenico Criscito (Zenit San Petersburgo) y Federico Balzaretti (Palermo). Teniendo en cuenta la mala temporada de Balzaretti, y la no presencia de jugadores que han cuajado un buen año en esa posición en la lista, como Paolo De Ceglie (Juventus), Federico Peluso (Atalanta) o Davide Brivio (Lecce), lo normal sería que Prandelli opte por llevar un solo lateral zurdo puro y cinco centrales, los tres de la Juventus más, casi seguramente Astori y Ogbonna.

En el mediocampo, Andrea Pirlo (Juventus), será el faro que guíe a la Azzurra, al igual que hace en el campeón de Italia. Fijos en la EURO serán jugadores que lo han sido durante la era Prandelli en Italia, como Daniele De Rossi (Roma), Claudio Marchisio (Juventus), Thiago Motta (PSG), Antonio Nocerino (Milan) o Riccardo Montolivo (Fiorentina). Además están las novedades de Luca Cigarini (Atalanta) para el mediocentro, Alessandro Diamanti (Bologna) para la mediapunta, y Ezequiel Schelotto (Atalanta) y Emmanuele Giaccherini (Juventus) para un hipotético sistema con bandas, por delante de Simone Pepe (Juventus) y Alberto Aquilani (Milan) que se han quedado fuera. La gran sorpresa ha sido el jovencísimo Marco Verratti (Pescara), regista del equipo abruzzese en Serie B, de 19 años, y que apenas ha debutado en la Sub21 italiana.

Y por último, en la delantera, Mario Balotelli (Manchester City) no ha sido "castigado" por Prandelli tras su sanción en Inglaterra y por tanto será fijo en la EURO. Antonio Cassano (Milan), está de vuelta tras sus problemas cardíacos y estará en Polonia y Ucrania. Al igual que Sebastian Giovinco (Parma), un fijo para Prandelli desde que llegó, y casi al 100% Antonio Di Natale (Udinese), en su primera convocatoria con Prandelli tras su buenas últimas temporadas y prácticamente por aclamación popular. Opciones también para los jóvenes Fabio Borini (Roma) y Mattia Destro (Siena), en su primera convocatoria internacional. Se quedan fuera son Giampaolo Pazzini (Inter), lógico tras su horrenda temporada con los nerazzurri, con los que perdió su puesto de titular, y especialmente sorprendente, sobre todo teniendo en cuenta lo vasto de la lista, es la ausencia de Alessandro Matri (Juventus), que aunque su temporada no ha sido brillante, podría haber sido necesario con su tipo de rol de delantero.

Prandelli apuesta por los jugadores que le han acompañado en la fase de la clasificación pero no tiene ningún miedo a llamar a jugadores por su buen estado de forma, sin tener en cuenta el nombre o el equipo en el que juegan. Además, Prandelli lanza un órdago a las nuevas generaciones, apostando por jugadores jóvenes (Ogbonna, Verratti, Destro) que aunque lo más probable es que no acudan a la cita internacional, es un mensaje de que la edad ya no es impedimente, como podía serlo antes en Italia, para acudir a la azzurra.


lunes, 7 de mayo de 2012

Juventus, merecido campeón


"Siamo tornati", gritaba Antonio Conte tras confirmarse el resultado de San Siro, esa derrota del Milan que, combinada con la victoria de la Juventus en Trieste, hacía que la Vecchia Signora volviera a la victoria. Han pasado ya 6 años de ese Scudetto de 2006, luego arrebatado en los despachos, como el de 2005, y 9 desde el último campeonato "válido" de la Juve, en 2003.

Habrá debate de si son ya 30 los Scudetti bianconeri,, los conseguidos en el campo, o 28 descontando esos revocados por el escándalo de Calciopoli. Si la Juventus debe poner en su camiseta, desde el año que viene, esa ansiada terza stella sobre el escudo, o no. De lo que no cabe discusión posible es de la validez y merecimiento de este campeonato de 2012. Además, como invictos.

El mano a mano con el Milan se mantuvo durante toda la temporada. Sin embargo, siempre la Juventus fue un paso por delante, tanto en la clasificación, como en sensaciones de juego y confianza. El único momento de apuro real para la Juventus fue durante esa mala racha que asoló al equipo juventino los meses de febrero y marzo. El equipo era incapaz de imponerse a equipos de la zona media-baja de la tabla, acumulando empates que permitieron a un buen Milan en esos meses auparse al liderato.

Entre aquellos malos partidos de la Juve tuvo lugar ese polémico 1-1 en el duelo directo contra el Milan, con el famoso no-gol de Sulley Muntari. Un fallo arbitral que ha dado lugar a que en muchas ocasiones el Milan, especialmente con las declaraciones del entrenador Allegri y de Galliani, se escuden en las actuaciones de los árbitros para justificar pinchazos rossoneri o las victorias de la Juventus. Unas acusaciones totalmente infundadas y que ni mucho menos han sido la causa de la derrota del Milan. No han sido los árbitros sino el gran juego desplegado por la Juve lo que ha permitido su victoria.

La apuesta por Antonio Conte en el banquillo, excapitán del conjunto turinés, salió a la perfección, a pesar de que era el primer banquillo de nivel del entrenador salentino, tras su exitoso paso en Serie B por Bari y Siena. Un entrenador que siente los colores y además de una inteligencia táctica enorme. Supo salir de su sistema predilecto, el 4-2-4, para adaptarse a las necesidades de la plantilla, para poner el 4-3-3 que permitía a Pirlo jugar acompañado de Marchisio y Vidal en el mediocampo. También variaría con el 3-5-2, para jugar con una mayor acumulación de hombres en el mediocampo. Un equipo imprevisible en su sistema y en los movimientos de sus jugadores. Todo lo contrario que un Milan con Allegri atado a ese sistema en rombo al que parece anclado.

Precisamente desde Milan llegó en verano, totalmente gratis, el que ha sido el buque insignia de Conte sobre el césped, el faro del equipo y portador de las intenciones futbolísticas del técnico. Andrea Pirlo ha cuajado una temporada excepcional, refrendándose tras un año en el que fue apartado sistemáticamente de la titularidad en el Milan por Allegri. Sin lesiones, Pirlo ha marcado desde su posición predilecta, delante de la defensa, el tempo del juego de la Juventus, iniciando la jugada y dando el último pase, como hacía en los años victoriosos del Milan en la pasada década.

A altísimo nivel también la temporada de los escuderos de Pirlo. Marchisio, especialmente visible en la primera parte de la temporada, demostró su carácter y capacidad de liderazgo, además de su llegada, nunca exento de calidad. Aunque es en el trabajo sucio donde más se puede apreciar el aporte de Marchisio. Y por supuesto, Arturo Vidal. El chileno llegado a Torino en verano, tuvo algún que otro problema de adaptación, pero en cuanto se entendió con Pirlo y Marchisio, se convirtió en jugador clave. Llegada a líneas atacantes, alternándose con Marchisio, apoyo a Pirlo en la creación  y sobre todo, su trabajo excelso en la presión alta en el campo en fase defensiva, uno de las líneas maestras del sistema de Conte.

Quizás el mayor problema de la Juventus este año estuvo en la falta de gol. El equipo, sobre todo frente a equipos pequeños, bien cerrados atrás. Ninguno de los delanteros gozó de excesiva continuidad, ni en su juego ni en el equipo titular. Matri, tras un inicio estelar de temporada, se quedó estancado en los 10 goles. Quagliarella o Borriello, llegado en enero, han tenido su oportunidad en las últimas semanas. Pepe obtuvo protagonismo como extremo en el 4-3-3, pero no tenía posición en el sistema con 3 defensas por el que Conte optó más desde invierno. Solo Vucinic ha tenido una relativa regularidad, acostumbrándose a partir más escorado o más centrado, según el sistema, y apareciendo en los momentos claves con su calidad y definición. Los goles que no aportó la delantera los ofreció el mediocampo, con la aportación de Marchisio (9 tantos), Vidal (7) y Pirlo (3). La falta de un goleador claro ha permitido la distribución de los goles por todo el equipo.

La férrea defensa con Barzagli, Bonucci y el futuro capitán Chiellini, la seguridad que ofrece Buffon en portería, olvidando ese fallo en Lecce el pasado en la antepenúltima jornada, las apariciones por banda derecha de Lichtsteiner y el relanzamiento de De Ceglie en la izquierda, también han resultado de vital importancia. Y por supuesto, el eterno capitano, Alessandro Del Piero, en su última temporada en la Juventus, siempre querido por la grada.

Un Scudetto que marca el fin de una época difícil, después de esa caída a Serie B, y el comienzo de otra que se vislumbra muy positiva. El último Scudetto de Del Piero. Pero el primero de una presumible larga lista de Antonio Conte.

martes, 1 de mayo de 2012

Un cuarteto por la Champions



Nunca había estado tan igualada la lucha por entrar en Champions League en Serie A. Hasta cuatro equipos, Napoli, Inter, Udinese y Lazio están empatados a 55 puntos en la tercera plaza de la clasificación, cuando apenas quedan 3 jornadas, 9 puntos en juego, para terminar la liga. Precisamente, esto ocurre el año que Italia pierde una plaza para acudir a la máxima competición europea, por lo que solo el ganador de esta competición "interna" se llevará el premio gordo, mientras el resto se tendrá que conformar con la Europa League.

El Napoli es a priori el equipo que lo tiene más sencillo para alcanzar esa tercera posición. Llega tras una buena racha de resultados, después de ganar a Novara y Lecce y dejarse empatar por la Roma en el último minuto. Cavani está en plena forma para este final de temporada, y aunque Lavezzi no está bien, Pandev no es un sustituto que esté desentonando estas últimas jornadas. Además, el calendario que le queda es el más cómodo de todos los competidores. Palermo en casa, visita a Bologna y recibir en la última jornada al Siena. 3 equipos de la zona tranquila de la tabla con sus objetivos de la permanencia ya cumplidos. Solo un Palermo motivado y  que todavía podría sentir, aunque lejano, el aliento del descenso, podría poner a los partenopei en problemas. Pero por lo demás, si Mazzarri se quita de encima esa mentalidad defensiva que le ha caracterizado últimamente, Napoli no debería tener problemas para ganarles. Además, le gana el goal average particular tanto a Udinese como a Inter, no así a la Lazio, por lo que prácticamente depende de sí mismo. Ahora mismo es el máximo favorito para hacerse con la tercera plaza.

A Udinese, pese a un mes, y una temporada en general, llena de altibajos, también le queda un calendario en principio sencillo, tras su victoria ante la Lazio. Eso sí, en la penúltima recibe a un Genoa, que está destrozado deportiva y administrativamente, pero que se estará jugando la vida por no descender. Además los otros dos partidos, contra Cesena y Catania, aunque no se juegan nada, son a domicilio. Y fuera del Friuli Udinese apenas ha conseguido 3 victorias en 17 partidos, fallando en muchos encuentros que deberían haber sido cómodos. Así, los friulanos se tendrán que encomendar a la magia de Di Natale y a la potencia de Asamoah para este rush final, sin Isla, que se lesionó de gravedad ya hace un tiempo, y sin Armero, a quién Guidolin lleva enviando sistemáticamente a la grada por su deplorable estado de forma y actitud. Udinese no sale bien parado en los goal-average en caso de empate, que pierde con Napoli e Inter y solo gana a Lazio.

Lazio llega a este final de temporada en caída libre, algo similar a lo que le ocurrió el año pasado, aunque este año mucho más tarde. Ha perdido un colchón importantísimo de 4 puntos que tenía hace 3 semanas, tras ganar al Napoli, por culpa de su empate con el Lecce y especialmente sus derrotas con el descendido Novara y en el duelo directo con Udinese. Sin Klose ni Hernanes, a pesar de que el brasileño lleva tiempo sin rendir, Mauri y Candreva deberán dar un plus para empujar al equipo. Siena y Atalanta deberían ser equipos con los que dar la vuelta a esta racha. Sin embargo, el alto número de bajas, incluidos Marchetti y Dias sancionados hasta final de temporada, especialmente graves en defensa, obligarán a Reja a hacer de nuevo equipos de circunstancias, y por tanto, muy débiles atrás ante equipos que juegan sin presión. Pero si llega con opciones a la última jornada, se lo jugará todo en duelo directo con el Inter.

Un Inter al que con Andrea Stramaccioni, a pesar de no llegar el buen juego, sí están llegando los resultados. Todavía no conoce la derrota, y ya son 6 partidos invicto con el joven técnico romano. Pero partidos como los jugados contra Fiorentina o el último ante Cesena dejan bastantes dudas. La pegada y la capacidad de reacción han sido claves, como también debería serlo la sociedad Álvarez-Sneijder, que puede dar buenos frutos, como se vio en la primera parte del partido ganado en Udine hace una semana. Los goles de Diego Milito serán igualmente vitales. Al final, el éxito o fracaso de Stramaccioni posiblemente se mida solo por el resultado del partido del próximo domingo, en el Derby della Madonnina. Un enfrentamiento que no solo puede permitir al Inter en esa lucha por Champions, sino además quitarle la liga a su eterno rival, el Milan. Una victoria nerazzurra en el derby probablemente daría, de manera matemática, el Scudetto a la Juventus. Y luego, ese último partido con la Lazio, en el que el que gane podría llevarse el premio de la Champions, o bien cederle a otro, Napoli o Udinese, esa posibilidad.

Muchas, demasiadas combinaciones de resultados, partidos sencillos que se complican, sorpresas, maletines dirección Siena o Catania o mil cosas que pueden pasar. Dos semanas de tensión, pasión y Calcio en estado puro. En dos semanas todo habrá pasado. Pero habrá que vivirlo. Y jugarlo.

lunes, 23 de abril de 2012

Serie A: Jornada 34



Volvió el fútbol a Italia, una semana después de la tragedia de Piermario Morosini, por quién se realizó un respetuosísimo minuto de silencio en todos los campos. La pena es que este retorno no fue todo lo feliz que debería haber sido, tras el esperpéntico espectáculo que se vio en Genova, con la lamentable actuación de los ultras del Genoa. En lo estrictamente deportivo, la Juventus volvió a aumentar su ventaja en el liderato de la Serie A, tras golear a la Roma y aprovechando un nuevo pinchazo del Milan, dejando la distancia en 3 puntos. En la lucha por la última plaza de Champions League, el gran beneficiado fue el Napoli, que fue el único de los implicados que venció, poniéndose a 4 puntos de la Lazio, que solo empató con el Lecce. Udinese también empató, continuando a 3 puntos de la tercera plaza, mientras Roma e Inter están a 5 y 6 puntos respectivamente. En la lucha por evitar la última plaza de descenso, el Lecce, con el empate ya mencionado, se pone a un solo punto del catastófrico Genoa, mientras Fiorentina y Cagliari continúan en peligro, con 3 puntos de ventaja.

Bochornoso espéctaculo en Genova (1-4). Esperpéntico lo que se vio en el estadio de Marassi en Genova. El equipo local, el Genoa, tras una campaña desastrosa, y ahora mismo a un punto del descenso, perdía 0-4 con el Siena en el minuto 9 de la segunda mitad. La situación del club es crítica, pero nada puede justificar lo que ocurrió. Los ultras del Genoa, apostados en la Curva Nord, invadieron las gradas más pegadas al campo, donde suelen estar los tifosi más tranquilos y familias, y con bengalas y petardos obligaron a Tagliavento a parar el partido. Desde allí, impidieron que se continuara el partido, que quedó suspendido durante casi 50 minutos. Se quedaron los jugadores del Genoa sobre el campo. El presidente Preziosi, cuya horrible gestión es una de las causas de la actual situación del Griffone, también bajó al céssped, pero ello no calmó ni mucho menos los ánimos. Y en ese momento se dio la que es posiblemente una de las imágenes más grotescas de la historia del fútbol. El capitán Marco Rossi, a instancias de los ultras, que lo pidieron como condicionante para dejar continuar el partido, se quitó la camiseta, como signo de indignidad para llevarlo, y recogió las de sus compañeros, que también se las quitaron. Una humillación para los jugadores y para el mundo del fútbol y del deporte en general. La de Giandomenico Mesto llorando es otra de las tristes imágenes que deja el encuentro. Solo Sculli, un jugador con tablas y carácter, y que tiene detrás historias como la de ser nieto de uno de los capos más importantes de la mafia, ser juzgado por asociación mafiosa o amañar partidos, negoció con los ultras. Se negó a quitarse a la camiseta y subido a la valla de protección, convenció a los ultras para que dejaran finalizar el encuentro. El Siena, gracias a los goles de Destro, Giorgi y el doblete de Brienza, consiguió con esta victoria la salvación virtual. Pero por desgracia, eso no fue lo más importante en un día para olvidar.

Otro pinchazo del Milan, en San Siro, con el Bologna (1-1). Otro partido horrible del Milan, en un mes que está resultando fatal para los rossoneri, perdiendo sus oportunidades de éxito primero en Champions League y ahora en una Serie A que parecía más o menos encarrilada. El bajón físico del equipo es notable, y el mal estado de forma de Ibrahimovic también. El sueco, tras un partido plagado una vez más de errores e individualismos innecesarios, solo apareció en los últimos minutos, cuando funcionó su sociedad con Cassano, y así llegó el gol que empataba el partido. Pero era el minuto 90 y no habría tiempo para más. Mientras, il Talentino, tras su convaleciencia, fue la única pequeña nota positiva del Milan, saliendo desde el banquillo y poniendo algo de mordiente y actitud al ataque rossonero. La primera parte había sido casi por completo del Bologna. Muy bien plantado, como siempre los equipos de Stefano Pioli, ahogando el poco creativo mediocampo del Milan creaban problemas y pérdidas, que eran aprovechadas a la perfección en la mediapunta por Diamanti y Ramírez. Así llegó su gol, antes de la media hora de partido. Pierde el balón Van Bommel ante la presión, Diamanti lo recoge y en la frontal del área se la cede a Ramírez, que bate cómodamente a Abbiati. En la segunda parte, el equipo se echó hacia atrás y lo pagaría cediendo el empate final. A destacar también otra jugada polémica, en la que el árbitro anuló un gol, fantasma para más inri, por fuera de juego de Ibrahimovic inexistente. Pase lo que pase, parece que siempre la polémica es protagonista en San Siro. Pero lo que queda claro es que con 5 puntos perdidos en los últimos dos encuentros en casa, el Scudetto vuela ya hacia Torino.

La Juventus humilla a la Roma y se acerca al Scudetto (4-0). Ni siquiera se había dado cuenta la Roma que el partido había comenzado cuando ya iban 3-0 por detrás en el marcador y con uno menos. En el 3-5-2 de Conte el mediocampo volvió a resultar la clave. De hecho, fueron sus tres componentes, Vidal, Pirlo y Marchisio los que además de mover los hilos del equipo anotaron los goles, haciendo de paso ineficaz el ligero cambio de sistema de Luis Enrique en la Roma, que metió a Pjanic en la mediapunta, dejando en el banquillo a Totti y con Borini-Osvaldo en ataque. El primer gol llegó tras una descoordinación táctica en el fuera de juego de la Roma, que habilitó en la izquierda a De Ceglie, quién asistió a Vidal para que fusilara a Stekelemburg ante la recurrente pasividad defensiva giallorossa. También el chileno haría el segundo, a pase de Vucinic, con un precioso tiro duro pegada al palo largo. Y por si fuera poco, tras una espectacular asistencia de Vucinic, que se destapó como pasador, Marchisio fue derribado por Stekelemburg en el área. Segundo penalty de la temporada a favor de la Juventus, expulsión del meta holandés y Pirlo, tras ser atajado su tiro por Curci, anota el rechace. Cesó el vendaval tras el descanso pero no el dominio de la Juve que se dedicó a controlar el tempo del encuentro, con una apática Roma de la que no se puede recordar ni un solo tiro a puerta. Así, Marchisio, al principio de la segunda mitad, cerró el póker con un chut desde la frontal tras taconazo de Vucinic.

En el resto de la jornada, la Lazio no pasó del empate contra el Lecce (1-1), con tantos en los minutos finales de Matuzalem y Bojinov. Udinese también pinchó, empatando en Verona (0-0), en el difícil campo del Chievo, que pudo ser peor si Handanovic no hubiera detenido un penalty. El Napoli ganó cómodamente al penúltimo Novara (2-0), gracias a los goles en la primera mitad de Cavani y Cannavaro, mientras Fiorentina e Inter empataron a nada (0-0), en un encuentro que volvió a demostrar el juego lento y plano de los de Stramaccioni, a pesar de la vuelta de Sneijder, y en el que Ljajic falló un penalty. El Parma goleó al Cagliari (3-0), con tantos de Giovinco, Okaka y Floccari, casi asegurando la salvación y metiendo a los sardos en más problemas.  Sin prácticamente nada en juego, empataron Cesena y Palermo (2-2), todos los goles en la primera parte, anotados por Santana y Rennella para los romagnoli, y Bertolo y Silvestre para los sicilianos, y el Catania venció sin problemas al Atalanta (2-0), tantos de Gómez y Seymour.


EL ONCE DE LA JORNADA

Dream Team 3-4-3 football formation

domingo, 15 de abril de 2012

Un duro golpe para reflexionar



Pasadas las 15:30 de ayer sábado, ocurría la tragedia sobre el césped del Stadio Adriatico de Pescara, durante el partido que enfrentaba al equipo local contra el Livorno. No ha sido ni mucho menos la primera vez que ocurre, pero sí se deberían poner todos los medios posibles para que fuera la última. Piermario Morosini, futbolista del Livorno caía desplomado sobre el césped  a causa de un infarto, que pocas horas después le causaría la muerte. Joven, apenas 25 años para un jugador cuya carrera había transcurrido prácticamente en el anonimato de la Serie B. De la cantera de Atalanta a Udinese, y de allí cedido a Bologna, Vicenza, Reggina o Padova, hasta llegar el pasado año a Livorno. Su mayor éxito lo alcanzó hacia 2009, cuando tras una gran temporada en Vicenza se ganó la convocatoria para la Eurocopa Sub21 con la selección italiana.

Resulta triste que tenga que ocurrir una tragedia de tal calibre para darse cuenta de las muchas deficiencias que tiene el Calcio hoy en día. La falta de seguridad en los estadios es alarmante, haciendo excepciones como la del nuevo estadio de la Juventus. En Pescara no había una ambulancia sobre el campo, sino que estaba en el exterior del estadio. Y por si fuera poco, un coche de la policía local estaba estacionado en el acceso, impidiendo la entrada de la ambulancia. Unos minutos que podrían haber salvado la vida al joven futbolista. No es de recibo ver cómo tuvieron que romper una luna del coche y quitar el freno de mano para apartarlo entre varios y que pudiera entrar la ambulancia, mientras Marco Verratti, mediocentro del Pescara, llevaba desesperadamente la camilla para socorrer a Morosini. Por no hablar de la no presencia de un desfibrilador sobre el campo, o de que en un principio no dejaran a un médico que estaba en la grada bajar a ayudar por no tener autorización.


Inconcebible es que con la cantidad de dinero que mueve el mundo del deporte, y el del fútbol en particular, la situación siga como está. Que sigan muriendo jóvenes deportistas, la mayoría en el más completo anonimato, ante la falta de previsión y controles. Que tenga que ocurrir una tragedia, con cámaras de televisión en directo, para resaltar las muchas deficiencias de los estadios italianos, una vez más. Que todavía no se adopten medidas, ni inversiones, para mejorar unos estadios arcaicos, inseguros y totalmente inadecuados en casos de situaciones de emergencia. Que todos hablen de cambio y renovación para que todo siga igual. 

Ojalá que el fallecimiento de Morosini sirva para abrir los ojos a los dirigentes del fútbol italiano y evitar otras situaciones similares. Descanse En Paz, Piermario Morosini.